17 de noviembre de 2009

la niña perdida no se halla en ecuador

carla dice:
te cuento una historia hilarante?

FRANK dice:
a ver

carla dice:
mmm el orden no lo encuentro bien, pero me parece que lo que primero pasó fue que intenté descargarme una versión nueva de messenger

FRANK dice:
ajá y?

carla dice:
luego sobrevino la noche y estaba sola y aburrida así que decidí deprimirme y me agarro nostalgia por una amiga muy cercana chilena que perdi hace mucho.
Nostalgia mal, porque siempre cabe la duda de que haya muerto.

FRANK dice:
mierrrda

carla dice:
porque no aparece en ningún lado y su nombre en google simplemente no lleva a ninguna parte
y el teléfono de su casa ya fue y ni siquiera está el nombre de su hermano ni de nadie. Es un caso rarísimo.

FRANK dice:
y ahora?

carla dice:
me desesperé,

FRANK dice:
no encuentro lo hilarante

carla dice:
y ahora tengo en el facebook a un pata que fue su novio desde el 94 hasta el 97, así que conversamos mucho y el también la ha buscado sin éxito.
Entonces encontré a una persona en Ecuador llamada María Gabriela Alvear (3 de 4 nombres, faltaba el Gómez). Le comento a este tipo llamado pato y me dice, conociendo a esa loca, quizás se haya ido a vivir al Ecuador…

FRANK dice:
ajaaaa

carla dice:
Esta ecuatoriana trabaja en un ministerio y es bolivariana ya? y digo, qué cosa pierdo yo escribiéndole y le mando una carta que decía
(un segundo, la estoy buscando)
disculpe, me llamo carla garcía y soy peruana.
busco a una persona llamada maría gabriela alvear gómez que estudió conmigo literatura en la universidad de chile.
quisiera saber si se trata de la misma persona.
gracias

FRANK dice:
y?

carla dice:
bueno, sigo un rato sufriendo un poco y buscando en internet, cuando al rato me llega una carta de respuesta
De: Jorge Enrique (xxxxxx@hotmail.com)
Enviado: jueves, 05 de noviembre de 2009 5:23:10
Para: xxxxx@hotmail.com

si cómo no, encantada
uno nunca se trata de la misma persona
de hecho, la universidad de chile tiene muchas puertas, tantas que no sabemos ya
si entramos o salimos
o volvimos
maria gabriela es una prócer
constituída y recliclada
de ella aprendí del reciclaje, el malevaje y los tangos
mas no del vino
no tengo nada que defender y esperamos encontrarla
de Ud.
Is

FRANK dice:
q??????

carla dice:
resulta,
que por algún azar,
la carta hacia la ecuatoriana
se mandó a otras treinta personas al random de mi lista de contactos

FRANK dice:
jaaaaaaaaaaaa

carla dice:
algunas otras respuestas fueron
carla que te pasa?? sabes que me llamo chiky
.................
Si se llama María Gabriela Alvear Gómez -literata, nombres propios con mayúsculas- va ser que sí. Es la misma.
Disculpada estás aunque te llames Carla García.
Besos
L
............
Carla,

primero que nada, tu no eres chilena sino peruana pero, ya que hemos hecho un intercambio por el cual yo me creo peruano, te dejare ser chilena
jajajjajajajjajajajjaj
Carlitra, la unica gabriela que conozco, chilena y que vive en peru es la esposa del pata (chileno) con que trabajo. Es muy interesante y entretenida asi que si quieres tambien te la presento.
Besos

..............

y finalmente

no recuerdo haber visto este correo...
no será tu alter ego?
besos


FRANK dice:
jajajajajaja

carla dice:
es normal que a una le pasen cosas así?

FRANK dice:
no mucho

carla dice:
el resto, los que no contestaron, deben esperar verme con una camisa de fuerza oculta en una mochilita.
por lo menos fue fructífera socialmente mi noche de nostalgia.

FRANK dice:
eso es verdad

carla dice:
pero hoy llego la última,

FRANK dice:
q decia??

carla dice:

Re: una consulta‏
De: María Gabriela Alvear (maria.alvear@defensordelpueblo.gov.ec)
Enviado: lunes, 16 de noviembre de 2009 17:49:36
Para: carla garcia (xxxxxxx@hotmail.com)

Siento decirle que no soy la persona.
Saludos


FRANK dice:
poco fructifera la búsqueda

carla dice:
es cierto

5 de noviembre de 2009

frase cliché para cinta clase b, que puede emplearse en muchos contextos

se supone que los superhéroes no salen con chicas fáciles.
uno de nosotros dos no es lo que dice ser.

4 de noviembre de 2009

MARÍA GABRIELA ALVEAR GÓMEZ

así se llama lo que se me ha perdido. no he usado esta ventana para nada que tenga que ver con lo útil, pero hoy porque estoy angustiada la uso para escribir su nombre en mayúsculas por vez número cuarenta y tres y finalizar las últimas horas de búsqueda online.
no sé por qué me angustio tanto cada cierto tiempo cuando la busco en páginas de universidades, o en las páginas blancas de chile o en el facebook o incluso en el hi5. es probable que tenga que ver con que ahora estoy en contacto con el pato, uno que fue su novio y que no sabe de ella desde el noventa y cinco.
yo recibí una carta suya en el dos mil. yo vivía en nueva york y me llegó un correo suyo desde santiago, donde decía que su abuelo había muerto y que trabajaba en falabella. de hecho su correo venía de un dominio falabella. me mandaba un cuento y decía que había aprendido a escribir distinto y pedía que lo leyera y le escribiera de vuelta. ni uno ni otro. un día cambié de vida y de correo y yahoo borró mi dirección vieja como si en realidad uno pudiera deshacerse del todo de antes. con la dirección, la carta, el correo y el cuento de la gabriela.
no me ha importado durante años. no me preocupó ni siquiera a sabiendas de que gabriela es media loca y media hija de puta. ahora vengo a angustiarme a media noche pensando que la hija de puta no fue ella y no me acuerdo ni siquiera de la última vez que nos vimos, ni sé si me despedí al volverme a vivir de santiago a lima. tampoco contesté la carta del dominio de falabella ni leí el cuento.
por si esos milagros de la vida ocurren en serio, paso a describir a la persona, que no es la misma gabriela alvear que vive en ecuador, ocupa un puesto de gobierno y es bolivariana.
gabriela alvear, la mía, vivía con sus abuelos en san bernardo. mide un poco más que yo y tiene pelo y ojos negros. viste como vieja y siempre lleva libros de apuntes. no dice su edad nunca. tiene un hermano llamado juan josé que tampoco aparece por ningún lado. su papá, de quien casi no hablaba, vivía en un lugar llamado gorbea, quizás dónde. su mamá, de la que nunca habló, vivía en santiago. tenía unos familiares en un lugar como un bosque, llamado las vizcachas al que fuimos un día el pato, la chata, gabriela y yo, a pasar el día. gabriela se gileaba a mi abuelo ángel, le decía don ángel, DON ÁNGEL, porque su voz suena así como un trueno, y le hablaba de música clásica y leía libros de la historia del perú para meterle floro y citaba las tradiciones de palma para él. tocaba sambas argentinas en la guitarra y cantaba canciones de parra y fumaba una cartón cada diez minutos, para mi mamá. competíamos entonces por hombres, salíamos al bar de la esquina y la pegábamos de adultas, de cultivadas, de mundanas, escribiendo veinte párrafos en una servilleta en las lanzas o en el café dante. comíamos congrio con puré, tomábamos vino. VINO, CARRRRRLA, así me ha dicho por tres o cuatro años afanándose por no sonar chilena. la GARRRCÍA, decía, se volvió loca, y me veía tirar cosas por la ventana del segundo piso, cassettes de cassettes, comics, y no me detenía sino me alcanzaba cosas para tirar y no cortarme el trance creativo. un día mi mamá overdoseó por error al abuelo y el señor de casi noventa años cavó una zanja delante de su casa de san beca. su abuelo.
gabriela miente. angélica y yo lo sabíamos desde el comienzo pero su mentira permanente es un encanto y provoca quedarse ahí creyéndole.
no estoy segura de que se llame así, ni de gorbea ni del hermano juan josé. a mí me decía que antes de entrar a la escuela de literatura había estudiado matemática pura, o medicina, dependiendo del día, y refrendaba su mentira sobre servilletas. después dibujaba y contaba historias de arte, hablaba en idiomas poco conocidos y desaparecía semanas.
no se cómo he dejado pasar dieciseis años, pero ahora me es urgente ubicarla. lo pongo aquí porque siempre hay alguien que sabe más que una de motores de búsqueda y cosas así, o porque tengo ganas de que la señorita alvear sepa de éste blog y lo lea aunque haya guardado silencio todo éste tiempo. quiero que me vuelva a mandar el cuento que me mandó en el dos mil y quiero que sepa que uno de sus cuentos me lo traje a lima en una servilleta, lo reescribí y fué un éxito entre mis amigos y vecinos. de hecho gané 300 dólares en un concurso de instituto gracias a ella.
si aparece se los doy.