12 de octubre de 2008

Se buscan alternativas de solución para un problema concreto:

René, Ricky, Xavier, Miguel y un tal Charlie, han decidido reencontrarse nuevamente. Como si la vida los separara cada dos años por error, o como si fuera especialmente interesante para alguien seguir de cerca su envejecimiento. Y cantan súbete a mi moto. Y vienen sin importarles que en ésta nación ya tenemos dejavus del horror como son Jimmy Santi o Yola.

Tenemos que conseguir (ubicándolos en distintos continentes, construyendo muros, robándoles los celulares u ofreciéndoles trabajos dignos que no impliquen cantar Claridad en el dos mil ocho) que esos cinco individuos no vuelvan a reunirse.

Por el amor de dios.

3 comentarios:

no decir dijo...

ahora que la nostalgia se puso de moda (y sobre todo rentable) no debiera sorprendernos una avalancha de reuniones...
lástima que algunas impliquen recuerdos prescindibles y malas canciones.

chica dijo...

Hoy en mi clase de inglés el profesor preguntó que si Elvis no se hubiera muerto en qué andaría, y me lo imaginé en un infomercial anunciando fajas reductoras.

Maaaaaal.

noseasloco dijo...

jajaja, sí pues, tremendo problema, si ha venido Nicola di Bari, ya con eso se excedió cualquier límite...

esos cuarentones, ya no tienen nada de menudos!!